“Somos 360°, como la realidad. Y así es como comunicamos”, dicen en la empresa Realidad 360° Argentina, especializada en el desarrollo de contenidos inmersivos e interactivos publicitarios y cinematográficos, stands de cine de realidad virtual (VR, por sus siglas en inglés), rental y training. Los videos 360°, la realidad virtual, aumentada y mixta permiten que este tipo de desarrollos sean aplicados en distintos segmentos, entre ellos, el de la salud. Sector en el que comenzaron a incursionar hace algunos años y del que observan un gran potencial de crecimiento.
En diálogo con Telemedicina-Salud en línea, Damián Andrés Turkieh, director y fundador de Realidad 360° Argentina, contó que la primera experiencia en el ámbito de la salud que tuvieron fue hace cinco años con un desarrollo de VR para dejar de fumar, al que le siguieron propuestas para reducir los niveles de stress, también con VR; contenidos didácticos para concientizar sobre la necesidad de vacunación contra el HPV, experiencias que detectan problemas en la vista a través de VR.
En todos los casos, se utiliza la última tecnología en visualización y sonido, permitiendo si así se lo requiere de experimentar y ser partícipe en primera persona de lo que sucede en la propuesta de contenido. “Tanto la fotografía como el video 360° colocan al usuario en el centro de la acción y brindan infinitas posibilidades a la hora de ver y escuchar un contenido”, explicó Micaela Di Pompo, del área de Producción de Realidad 360°.
Durante la exposición presencial de las XVII Jornadas de Informática en Salud organizadas por el Departamento de Informática en Salud del Hospital Italiano de Buenos Aires, la empresa mostró la ficción “Metro Veinte”, que es una mezcla de VR con producción audiovisual estándar. “Son episodios que hablan sobre sexualidad y discapacidad a través de una joven en silla de rueda que cree estar embarazada, va al ginecólogo y cómo cuando se presenta la tratan distinto”, resumió Di Pompo. La serie está grabada a un metro veinte desde el piso, es decir, la altura de la protagonista que ve el mundo desde ese lugar físico. “Fue lanzada en 2017, ganó en 2018 en el Festival de Venecia y fue parte de otros festivales de cine”.
En Realidad 360° realizan desarrollos a medida y que, en temas de salud, se pueden utilizar las herramientas de realidad virtual y aumentada tanto para rehabilitación como para diálisis, quimio, simulación de cirugías, tratamiento de fobias, etc. “Depende de cada proyecto se puede hacer más o menos complejo el desarrollo”, señaló Turkieh.
La principal diferencia entre realidad virtual y aumentada es que, en el primer caso, cuando la persona tiene el visor puesto, toda su realidad es lo virtual y no ve nada de lo que lo rodea en la realidad. Se encuentra en un universo virtual que puede incluir interactividad o no. Mientras que en la realidad aumentada lo que se hace es agregar virtualidad a la realidad a través de algún dispositivo. Y en el metaverso lo que sucede es que es un universo virtual que permite contactarte con otras personas reales que también están en ese universo.